Hoy en día, la lucha contra el cambio climático ha ganado más importancia que nunca. Tanto es así, que se ha convertido en una prioridad la necesidad de reducir las emisiones de gases que tienen efecto invernadero, de optimizar el consumo energético y, de disminuir la utilización excesiva de los recursos naturales.
En este contexto, surge el concepto de edificación sostenible como técnica de construcción enfocada al respeto del medio ambiente en su entorno constructivo. Esta reflexión empieza desde la fase de proyecto, e intenta tener en cuenta el impacto ambiental durante su ciclo de construcción, vida útil y demolición. En resumen, lo que se busca con la edificación sostenible es reducir al máximo el impacto ambiental de las construcciones.
Características más importantes de una construcción sostenible
1. ¿Dónde va a estar situada?
A la hora de construir una vivienda, lo primero que debería hacerse en cuanto a su localización es analizar el terreno a través de un estudio geobiológico.
El lugar donde se vaya a proceder con la construcción debería alejarse de áreas con grandes niveles de contaminación atmosférica y acústica, con líneas eléctricas cercanas y lejanas a fallas geológicas.
Además, idealmente debería estar cerca de grandes áreas de vegetación. Esto es así porque la vegetación ayuda a disminuir la contaminación atmosférica y a mejorar el confort térmico y climático.
2. ¿Hacia dónde va a estar orientada?
Aunque pueda parecer poco relevante, la realidad es que la orientación del edificio es muy importante. Aprovechar el impacto directo del sol mediante una orientación hacia el sur puede ayudar al confort y a la climatización de la casa, sin incurrir en gastos energéticos adicionales.
3. ¿Se van a utilizar energías renovables para mejorar el autoconsumo?
En cuanto al tema de la energía del hogar, una edificación sostenible debería hacer uso de energías renovables. Recordemos que este tipo de energías tienen un menor impacto medioambiental que las energías tradicionales y, encima, son renovables.
La más utilizada hoy en día es la fotovoltaica, pero también tienen una gran presencia la eólica, hidráulica y geotérmica, en cuanto a generar electricidad directamente. En temas de convertir la energía en calor, se puede optar por la energía solar térmica o la aerotermia, entre otras.
4. ¿Va a tener un buen aislamiento térmico?
Otra forma que tiene una edificación sostenible de ayudar al consumo energético es a través de un buen aislamiento térmico.
Al evitar la pérdida de energía por puntos débiles como pueden ser las ventanas, los muros o las localizaciones con puentes térmicos, será más fácil mantener una temperatura constante dentro del edificio. Lo ideal sería tomar medidas como instalar ventanas de doble cristal o aislar el edificio exteriormente.
5. ¿Qué materiales va a usar en su construcción?
Existen numerosos materiales que pueden emplearse en la construcción de una vivienda pero, para que se consideren sostenibles, tienen que cumplir una serie de requisitos, como la durabilidad, la necesidad mínima de mantenimiento y que sean reciclables, reutilizables y recuperables.
Además, se suelen seguir una serie de pautas a la hora de elegirlos:
- Que procedan de una producción justa.
- Que tengan un precio accesible.
- Que sean valorizables.
- Que no sean contaminantes.
- Que consuman poca energía durante su ciclo de vida.
- Que en su entorno tenga un valor cultural.
- Que provengan de fuentes abundantes y renovables.
- Que sean en parte reciclables.
- Que no contengan CFC ni olores.
- Que procedan del lugar más cercano posible a la edificación.
6. ¿Se van a instalar sistemas de seguimiento y verificación?
Después de comprobar que la edificación cumpla todos los requisitos anteriores, se convierte en necesario llevar un seguimiento de los parámetros que influyen en el comportamiento energético de nuestra vivienda, como pueden ser el consumo de electricidad, la temperatura, los niveles de humedad, la calidad del aire…
Para ello, existen numerosos dispositivos y sistemas que nos ayudan a hacer un seguimiento y control de todos esos indicadores y, así, poder adoptar las medidas convenientes si se producen irregularidades dentro de los edificios.
Los sistemas de evaluación de edificación sostenible
Para saber si una edificación cumple con los requisitos necesarios para considerarse como sostenible, existe una gran variedad de sistemas de evaluación que establecen pautas a seguir para conseguir una certificación que lo demuestre. Normalmente, estos sistemas se basan en tres aspectos clave: el ambiental, el económico y el social. Los considerados más importantes son:
- Passivhaus del Passivhaus Institut en Alemania.
- Certificado Verde del Green Building Council en España.
- Building Research Establishment´s Environmental Assessment Method (BREEAM) del Building Research Establishment en Reino Unido.
- Leadership in Energy & Environmental Desing (LEED) del U.S. Green Building Council en Estados Unidos.
- Haute Qualité Environnementale (HQE) del Alliance GBC-HQE en Francia.
- Comprehensive Assessment System for Built Environment Efficiency (CASBEE) del Japan Sustainable Building Consortium en Japón.
- Certificación Energética de Edificios a nivel europeo.