Si tienes un proyecto para construir una vivienda o un edificio de viviendas de forma sostenible, es probable que hayas escuchado hablar de las certificaciones que existen: BREEAM, WELL, Passive House Institute, Leed y otras muchas. Pero, la duda es: ¿qué certificación verde elegir?, ¿en qué se diferencian? En este post analizamos todas las respuestas.
Existen diversas certificaciones verdes para proyectos de construcción y de rehabilitación sostenibles y es importante conocerlas para saber cuál elegir. Las más destacadas son las siguientes:
BREEAM (Building Research Establishment Environmental Assessment Methodology)
Evalúa la sostenibilidad de los edificios y tiene como objetivo fomentar la construcción sostenible.
Existen varios tipos de certificados BREEAM en función del tipo de construcción y uno de ellos se enfoca en edificios de viviendas nuevos o rehabilitados. Tiene cinco niveles: correcto, bueno, muy bueno, excelente y excepcional.
El certificado BREEAM es uno de los más extendidos en Europa y se centra en la sostenibilidad de los edificios.
Este certificado se centra, en especial, en dos elementos: la salud y el confort de las personas y se miden aspectos como: la calidad del aire y del agua, la iluminación, el movimiento, el confort térmico y los materiales.
LEED (Leadership in Energy in Environmental Design)
Es una certificación que puede aplicarse en todo tipo de edificios. Para obtenerlo se consideran varios elementos como el ahorro de agua, los materiales utilizados, los recursos y el confort ambiental interior.
Tiene varias categorías: oro, plata y platino.
LBC (Living Building Challenge)
Es un certificado internacional que tiene como meta impulsar los más altos estándares de sostenibilidad en la construcción. Considera elementos como: el lugar, el tratamiento del agua, la eficiencia energética, la calidad del aire, materiales de construcción respetuosos con el medioambiente, el efecto sobre el entorno y la belleza del edificio.
El Passivhaus es el estándar más exigente que se centra en la eficiencia energética y la reducción de las emisiones de carbono.
Se aplica tanto a edificios en construcción, rehabilitaciones, barrios paisajes e infraestructuras.
Es un certificado que tiene su origen en Dinamarca y que se centra en que el diseño del edificio se enfoca en las necesidades de las personas y en que la construcción sea sostenible y tenga un mínimo impacto ambiental.
Se puede aplicar a viviendas particulares, edificios de oficinas o edificios públicos. Y se puede tratar de edificios nuevos o renovados.
Certificado verde (Valoración de Eficiencia de Referencia de Edificios)
Es un documento que acredita la sostenibilidad de un edificio en relación con varios elementos: ubicación del edificio, calidad ambiental interior, recursos, integración, calidad técnica.
Se aplica a inmuebles residenciales, terciarios, interior o polígono industrial. Tiene varios niveles de certificación que van del cero al cinco.
Es el estándar más exigente que se centra en la eficiencia energética y la reducción de las emisiones de carbono, lo que repercute en la mejora de la calidad de vida y en la sostenibilidad urbana. Se trata de edificios de consumo nulo o casi nulo.
Existen tres niveles: classic, plus y premium.
Con este estándar se certifica el cumplimiento de varios elementos fijados por el Passivhaus Institute que se centran en el aislamiento térmico, las altas prestaciones de puertas y ventanas, la ventilación con recuperación de calor, el aprovechamiento de energía solar o la estanqueidad del aire.
Entre sus beneficios, cabe destacar un ahorro de un 90% de consumo energético, la notable mejora de la calidad del aire interior o la ausencia de emisiones acústicas y de olores exteriores.
Lo primero que debemos considerar es que son certificaciones voluntarias y que acreditan, con carácter general, que una construcción es sostenible.
La elección depende del aspecto que quieras priorizar en el proyecto de construcción y de la calificación que puedas lograr con un certificado u otro. Por ejemplo:
En definitiva, no hay una respuesta, sino que depende de cada proyecto y del objetivo que se quiera alcanzar. Lo que se puede ver es estudiar la calificación que se obtendría con cada certificación para evaluar cual favorece más al proyecto que se va a desarrollar.
